Aquí hay pocos espacios -dentro de una larga y conocida lista de bandas- y eventos para tocar en escenarios grandes, donde tienes más metros cuadrados para hacer un mejor performance, donde los monitores no generen esa contaminación acústica que en medio concierto no escuchas nada con claridad o simplemente tus oídos no entienden nada de lo que está pasando.
Con mucha desesperación y con ganas de encontrar una salida, hallé algo muy saludable y económico -para lo que me prepuse- los lindos In Ears.
Antes de hablar de lo que tengo y uso, quiero seguir tallando este problema, que seguro muchos lo vivimos.
Con una banda, en un local donde muchas bandas tocan mientras la gente consume sentada mientras te ve tocando, fuimos a probar sonido una hora antes del concierto, todo listo, el sonido parecía estar bueno y había buen monitoreo pero por cosas que pasan que uno no le encuentra ciencia aún, a la hora de tocar era un desastre, no escuchaba nada, absolutamente nada, me iba de tiempo, no escucha el pulso del bajo, la voz no existía, las guitarras hacían demasiada bulla y tenía que tocar todo más despacio, los platillos tocarlos con una pluma, y el bombo tampoco existía -a no ser que todos estaban callados-. Triste historia, pero más que un triste monitoreo y concierto era la realidad golpeándome una vez más y esta no pude ser indiferente.
¿cuál era el próximo paso?
Juntar mi billete y comprar un decente sistema de monitoreo In Ear.
Hablando con dos de los ingenieros que trabajo en las bandas en las que soy miembro, me di cuenta de tenemos el mismo punto de vista, ellos son
Max Ochoa y
Gian Carlo Expezua, sonidistas que han entendido muy bien cuál es mi sonido y qué exijo en mi monitoreo.
Para ellos, el monitoreo con parlantes te da otra vibra, como músico es otro "punche", sentir el BOOM del bombo y bajo en el pecho es otra experiencia, algo que por naturaleza te pone la piel de gallina, pero esta linda realidad solo se exigen en eventos grandes, festivales con amplios escenarios, mientras toques en bares, el problema persiste. Ellos también afirman que el monitoreo por In Ear es lo más ideal para escenarios tan pequeños, fue con ellos y ese punto de vista que me decidí por comprar este sistema.
Me compré una consola de 02 canales, cosa que si me dan la posibilidad, uso el In Ear en estéreo. ¡Esto también es fabuloso!
¿Cómo es que los uso ahora?
Fácil, Si es en un bar es 100% In Ear. Si en un escenario con más de 75 mts cuadrados (aproximadamente) uso los In Ears y pido bajo + bombo en mis parlantes. Esta última me lleva a la gloria.
No hay nada que perder, es solo invertir en tu instrumento sin salir con un mal aire después de cada concierto.
Abrazo.